Debi Nova es una cantante y multiinstrumentista costarricense que nació en 1980. Estudió música desde muy joven, viajando a Estados Unidos para poder especializarse, y catapultó su carrera internacional en el pop latino durante los años 2000 como corista de Ricky Martin, llegando también a trabajar con numerosos artistas como Britney Spears, Black Eyed Peas, y Franco de Vita, quien, además de incluirla en su canción Si ‘Quieres Decir Adiós’, la invitó a ir de gira con él interpretándola en muchos países. En 2004 tuvo su primer éxito propio con ‘One Rhythm’, cuyo remix terminó siendo parte de la banda sonora del videojuego FIFA Football 2005. 

Su discografía solista comenzó en 2010 con Luna Nueva, y hoy en día consta de 5 discos, con el sexto Todo Puede Convertirse en Canción creándose. Ha tenido 5 distintas nominaciones a los premios Latin Grammy, y una a los Grammy, ganando uno por su disco 3:33 en el 2020. Debi gusta de hacer álbumes conceptuales donde trata experiencias personales, capítulos de su vida y aprendizajes que ha hecho. Además de cantar, también conduce el podcast Círculos 3:33, donde busca empoderar e inspirarse en sintonía con otras mujeres para generar un cambio positivo en la sociedad, reflejando mucho de esto en sus canciones. Su último álbum, Dar Vida, de 2024, relata cómo ha vivido la maternidad desde que tuvo a su hija Paloma, quien hoy tiene 3 años y medio.

De Todo Puede Convertirse en Canción por ahora solo conocemos su primer single, ‘Tu Manera de Amar’. En esta canción, con un prominente bajo y un beat pegadizo, su voz toma protagonismo para cantar sobre el amor que todos merecemos, pero dándole importancia al amor propio que debemos trabajar para estar en condiciones de recibir y reciprocar el de los demás. El videoclip, dirigido por Sebas Coto, tiene carga simbólica e interpretativa, con muchos planos secuencia, coreografías continuas, y Debi representando a los dos personajes protagónicos como un simbolismo de los dos lados de ella que tiran para lados contrarios en la batalla de alcanzar el amor propio. 

Inspirados por la potencia del mensaje que transmite, estuvimos conversando con Debi Nova sobre este sencillo, todo el camino que lo ha inspirado, el amor, y todo lo que vendrá en estos próximos meses. 

Quiero felicitarte por el lanzamiento de ‘Tu Manera de Amar’. Tiene una carga emocional muy fuerte, no solo en la canción, también en lo visual. ¿Cómo fue el nacimiento de esta canción, cómo fue construir su atmósfera? 

Ha sido muy bonito este nuevo ciclo en mi vida, este nuevo álbum. Viene después de un álbum que fue muy denso y que me marcó, no solo por el álbum en sí, sino porque estaba atravesando el nacimiento de mi hija, entonces, fue un álbum que me costó mucho, fue casi que parirlo. Y este me sirvió para tratar de reclamar ese gozo y esa fluidez con la que debería de existir la música. Creo que ‘Tu Manera de Amar’ habla mucho del momento en el que estoy, porque es una canción que celebra este amor que puede interpretarse como un amor hacia otra persona. Sin embargo, a mí me gusta como un recordatorio hacia mí misma de sacudirme todas esas cosas que no se alinean con lo que estoy viviendo y sintiendo, y de darme amor.

¿Cómo considerás que es tu manera de amar?

¡Qué buena pregunta! Mi forma de amar es muy leal, yo soy muy leal. Cuando te amo y eres parte de mi vida, te quedas por años, a veces más de la cuenta. A veces he tenido relaciones que son más largas de la cuenta porque soy una persona muy leal y muy apasionada a la hora de amar.

Hay un libro de Gary Chapman sobre los lenguajes del amor, habla de que no todos lo demostramos o nos sentimos amados de las mismas formas. Hay gente a la que le gustan las palabras de afirmación, otros se sienten amados por ejemplo en los actos de servicio. ¿Qué lenguaje del amor te representa más?

Yo creo, a ver, estoy pensando… qué bueno, porque me hace ponerme en la posición de cómo me ven los demás a mí. Siempre pienso en la manera de amar, no sé, de mi esposo hacia mí o de mí hacia mí. A mí me gusta mucho escuchar, a mi esposo no le gusta hablar, pero a mí me gusta mucho escuchar, entonces trato de que me hable más y a veces eso le molesta a él (risas), pero te diría que me gusta mucho escuchar para poder empatizar con las personas. Esas son las partes que más me hacen ser agradecida, cuando puedo escuchar y empatizar. No sé si eso es una manera de amar, pero creo que sí.

Con el lanzamiento del single hablaste de la importancia de aprender a quererse bien a una misma antes de poder recibir amor. ¿Cómo fue ese camino para vos? 

Es un camino que sigue, es un trabajo de cada día, ese ejercicio de ser gentil con uno mismo, porque vivimos en un mundo que cada día te recuerda lo contrario, de todas las cosas que te hacen falta para poder ser más A, B, C, D, E. Y creo que el ejercicio es a diario de ver hacia adentro y agradecer quién es uno, las cosas que tiene, las cosas que ha logrado. Entonces te diría que es un camino que no se resuelve. No sé si tiene un fin este camino de amarse a uno mismo. Creo que es algo de todos los días, y que no es lineal. No es que cada vez te quieres más. A veces hay días que uno se siente muy bien en la piel de uno mismo, y hay días que retrocedes 40 pasos para atrás y no quieres ni existir. El trabajo es ese, es un trabajo de pequeños pasos y un trabajo de a diario.

Estoy muy de acuerdo contigo. Respecto al sonido, mencionaste influencias como por ejemplo Fleetwood Mac y otros artistas que oscilan entre lo que es el indie y lo que es el pop. ¿Qué tipo de sonidos o qué discos estuvieron en tu radar mientras creabas lo nuevo? ¿Qué estuviste escuchando últimamente, por ejemplo? ¿Qué te inspira?

Hice una playlist para inspirarme para este álbum de cosas que captaron mi atención. El álbum de Lola Young fue uno que me inspiró muchísimo. Arlo Parks, Victoria Monét, Bobby McFerrin, Frank Ocean, Kacey Musgraves… ¿quién más? Laufey, me encanta. En fin, de todo un poco.

¡Wow, es muy variado sí!

Sí, ese es mi problema, que me gusta todo y más. No le tengo miedo a la música, me gusta todo

¿Lo ves como un arma de doble filo a la hora de mantenerte dentro de las líneas de lo que estás haciendo? Lo llamaste un problema, pero también podemos verlo como algo muy bueno. 

Sí, claro, lo digo sarcásticamente, porque realmente si me pongo a pensar como consumidora de música, a mí me ilusionan mucho los artistas que toman riesgo y que constantemente están sorprendiéndote. Pienso en Nathy Peluso, Mon Laferte o Rosalía, que no necesitan encasillarse en un género, y creo que eso es lo bonito de crear, de explorar, experimentar. En este álbum sí sentí esa necesidad de salirme de mi zona de confort. 

¿La sentiste como una parte natural de tu crecimiento artístico o fue a raíz de algo puntual?

Yo creo que es como llegar al otro lado de Dar Vida, que fue mi álbum pasado. Esta nueva mujer, después de la maternidad. Es como tomar conciencia del momento en el que estoy en mi vida. Y mucha de la intención de este álbum fue liberarme de los estigmas que nos ponemos como mujeres, como artistas: “una mujer a esta edad no debería de A, B, C, D, E”, “Una cantautora no debería de bailar en un video”. Todas estas cosas que me rondan en mi cabeza, que no sé de dónde vienen, pero creo que tiene que ver con la industria en la que nos manejamos, con el mundo, la sociedad que nos dicta muchas cosas que no son necesariamente ciertas. Así que la intención fue esa, liberarme de todos esos estigmas.

¡Me encanta! Ahora que mencionaste lo que hipotéticamente debería o no debería hacer una artista en un videoclip, el tuyo representa una lucha interna, y tiene una coreografía continua y súper potente. ¿Cómo fue construir la narrativa que querías contar? ¿Qué tal el trabajo con el director y el coreógrafo para traducir todo? 

Primero fue una conversación con Sebastián Coto, el director con quien ya he trabajado antes, y le planteé la opción de hacer un video interpretativo porque nunca lo había hecho, siempre hay narrativas, o hay otros elementos, otros personajes. Esta era la primera vez que yo quería moverme en un video y que la historia se desarrollara desde ahí. Después empezamos a hablar del ciclo en el que estoy, él empezó a preguntarme de las cosas por las que estaba pasando, los pensamientos, ideas, y surgió esta Debi, que es la que no me deja vivir en paz, la que me da el látigo, es la que me dice “no puedes hacer esto porque se va a ver mal, porque ta, ta, ta”, esta mujer que me pone muchos límites. Entonces de ahí se involucró Camryn Eakes, que es la coreógrafa y directora de movimiento y empezamos a desarrollar esta historia, esta narrativa con movimiento de estas dos personas, estos dos personajes, que al final son una misma. Me reuní con ella unas tres veces y nos movimos, ella tenía unas ideas, después esas ideas se transformaron en mi cuerpo, y la verdad que lo disfruté mucho, mucho, mucho, mucho.

¡Genial! En todo este proceso de aprender, desaprender, crear, y manejar de una forma distinta la relación contigo misma, ¿hay algo que hayas aprendido que quieras destacar?

He aprendido varias cosas, la primera que se me viene a la mente es que la relación más importante que vamos a tener en esta vida es con nosotros mismos, y esa es la relación que hay que cuidar. Como madre he entendido que esa es mi gran responsabilidad, cuidarme a mí misma para poder cuidar a mi niña, porque si yo no soy buena conmigo misma, eso es lo que ella va a aprender, eso es lo que ella va a mirar, y va a crecer viendo a una mujer que no es gentil consigo misma. Esa ha sido una enseñanza bonita, y después lo otro es que hay que pasarla bien, hay que disfrutar las cosas, porque si no se vuelve pesado el camino. En el momento que me liberé y disfruté mucho del proceso, fue cuando empezó a fluir, y ahora que veo el álbum ya casi terminado no es que no me importe qué va a pasar con él, pero sí tengo un gran sabor de lo que fue el proceso, porque me la pasé muy bien.

Sí, es súper importante. Yo considero que para llegar a un buen resultado tenés que disfrutar el proceso, si no, en el producto final se nota.

Claro, total, y eso también tiene que ver mucho con rodearse de las personas adecuadas, la pasé muy bien gracias a que estuve trabajando con gente increíble, buenas personas, entregadas de corazón, eso es muy importante.

Es muy importante tener un buen equipo. Hablemos un poco del álbum que vas a lanzar. ‘Tu Manera de Amar’ es el primer adelanto, y por lo que entendimos el álbum abarcará todo el proceso transformador. ¿Me contás un poco más sobre el origen del álbum, cómo viene avanzando y cómo estás haciendo la producción?

La verdad no he hablado mucho del álbum aún, pero te cuento que comenzó con una semilla que fue una canción que se llama ‘Brindo’. ‘Brindo’ es una canción que habla sobre algo muy duro y traumático que me sucedió hace 20 años, y no había podido escribir una canción al respecto, me tomó esta cantidad de años poder escribir una canción sobre ese episodio de mi vida, de violencia de género. Hay una frase en la canción que dice “convierto esto en melodía”, y de ahí empecé a entender el poder que tiene la música en mi vida, porque aunque es algo que hago a diario, a veces me tengo que detener y entender lo poderoso que es para mí poder escribir una canción. Entonces el álbum se llama Todo Puede Convertirse en Canción, y las letras abarcan una gama de sentimientos por los que yo tengo que atravesar para sanar. El ejercicio de componer una canción es mi manera de sanar, es mi manera de amar. Ahí está la respuesta, es poder escribir una canción, poder convertirla en música para compartirla con el mundo, ese es mi ofrecimiento al mundo. El álbum trae 10 canciones y en los próximos meses voy a estar compartiendo más.

Ahora que pudiste poner en palabras y en música algo que te pasó y que no habías podido hablar por 20 años, y que lograste plasmarlo en algo bonito, que vamos a conocer y también va a formar parte de un público, es decir que de alguna manera ya no va a ser más solo tuyo, ¿te sentís más liberada, un poco más liviana tal vez? 

100%, sí, 100%. A mí se me olvida el poder que tiene compartir música, y a veces estoy en un momento de depresión o de tristeza, y tan solo necesito agarrar mi guitarra y cantarle una canción a mi hija, y eso ya me hace bien. Creo que se me olvida porque lo he hecho por tantos años y es mi profesión, entonces a veces no tengo esa perspectiva de lo mágica y poderosa que es la música, pero definitivamente para mí es mi herramienta de sanación.

Respecto al álbum, más allá de lo conceptual, lo emocional y lo personal, a nivel sonido, ¿qué estás trabajando? ¿Cómo viene el equipo? ¿Tenés alguna colaboración en mente?

Vienen tres colaboraciones, una con Leonel García, de México, otra con Alexandre Carlo, el cantante de Natiruts, de Brasil, y una con Jaze, de Perú. Muy variadas las colaboraciones, muy maravillosas las tres. Sónicamente es un álbum con el que trato de siempre estar en esta fusión, en este limbo entre lo más acústico y las cosas más espaciales, producidas. Me inspiraron mucho álbumes indie como el de Lola Young, el de Clairo, lo que hace Rosalía también, fue una gran referente, así que traté de explorar. Mi voz tiene más efectos de los que usualmente usé en otros álbumes: reverbs, delays… en ‘Tu Manera de Amar’ tiene efectos, también cómo posicionar mi voz en otros lugares dentro de la mezcla de los instrumentos, y a diferencia de otros álbumes donde la mayoría de las canciones las escribo yo con una guitarra, esta fue más de sentarme a los teclados, sonidos de sintetizadores. Así que sí, viene mucha música.

¡Qué lindo! Entonces, ¿tu proceso de composición normalmente es así? Estás vos con tu guitarra, ¿pensás primero los acordes y después las letras o te manejás distinto?

Depende, cada canción es un universo. Las canciones más exitosas para mí de escribir son las que ya tengo una idea de letra, no necesariamente muy resuelta, pero al menos una frase, y con eso ya sentarme a componerla. Sin embargo, ‘Tu Manera de Amar’ no fue así, fue una canción que nació desde un beat y un bajito, y ahí yo empecé a cantar y la frase “tu manera de amar” fue lo primero que se me vino a la mente en ese momento. El álbum trae de todo y hay canciones que vinieron de una desidia de letra, otras que vinieron por medio de un acorde o un beat. Cada canción viene como quiere venir.

Previamente colaboraste tanto con artistas de renombre global como también con gente quizás menos conocida. ¿Cuál es el equilibrio entre lo global y lo local?

Es algo que no me he preguntado, no me siento a hacer la estrategia de “quiero colaborar con esta persona porque es local”, es algo que ha surgido en el camino por amistad o por cosas de la vida. Me acuerdo que lo de Franco De Vita invitándome a cantar con él fue algo muy fuera de lo que jamás me imaginé que iba a pasar porque es parte y magia de la vida. No te diría que es algo que haya tratado de armar, el perfecto balance entre lo global y lo local, sino que simplemente así ha surgido.

También sabemos que tu carrera es muy extensa y artística. 

Tengo un proyecto que es mi otro bebé, que se llama Círculos 3:33, que es una plataforma para mujeres que creamos junto a una amiga querida que se llama Melissa Quirós hace cinco años, durante la pandemia, y es una plataforma que me ha dejado muchas cosas bonitas, muchísima satisfacción. Generamos espacios para mujeres, círculos presenciales, tenemos un podcast también y lo que hacemos es canalizar fondos de empresas en Costa Rica para darlos a donación a fundaciones que lo necesitan. Ha sido muy lindo porque es un proyecto que camina solo, y creo que camina solo porque su intención no es lucrar sino hacer algo positivo por nuestra comunidad, por nuestro país. Las mujeres de nuestro país han sido una gran fuerza para mí, porque al estar rodeada de mujeres no me siento tan sola. Cuando voy a sacar música al mundo, aunque siempre da un poco de susto, siento que vengo con esta red de mujeres y de apoyos y me siento muy orgullosa de lo que hemos logrado.

¡Brillante! Es una carrera con una mirada muy amplia. En tus dos décadas de trabajo te reinventaste en varias ocasiones sin perder tu esencia. ¿Qué es lo que mantiene viva a tu conexión con la música hoy en día?

Creo que cuando dejo de preocuparme por el resultado, por las plataformas, los streams, los algoritmos, el contenido, etc., y me concentro en el placer y la sensación que me produce cuando estoy en un estudio, florece una idea  y nace una canción, eso es lo que me mantiene viva y haciendo música. Yo creo que… no sé si es que soy necia, pero a veces digo “¿será que sigo haciendo esto después de 25 años?”, pero no puedo parar, me encanta lo que hago.

¡Me encanta! Como ya hablamos, trabajaste con artistas enormes de maneras que no esperabas, como Franco de Vita o Ricky Martin, y también te posicionaste con tu propia voz, ya no sos la voz de apoyo de otro artista. A la hora de pensar en una colaboración invitando a un artista ¿qué es algo que te atrae o que te desafía?

Creo que viene de la canción. Cuando hay una canción ella misma me dicta como un “uy, esta canción sonaría increíble con…” y a veces pasa sin planearlo. Por ejemplo esta canción con Leonel García, yo estaba en México y con Leonel estuve de gira con Franco De Vita, y lo admiro muchísimo, entonces admiración y respeto, esos claramente tienen que ser los ingredientes. Lo llamé y le dije “oye Leo, escribamos una canción” y te digo, a veces la cosa funciona, y a veces vas a escribir una canción con esta persona a quien admiras y respetas y no sale nada. Es algo muy mágico, muy misterioso, pero con Leonel fue así. Lo llamé, escribimos una canción, esa noche grabamos el demo y ese fue el demo que va a salir en el álbum. Lo vestimos un poquito más, le pusimos cositas y ahora va a ser parte del universo.

¿Cuáles son tus planes para este año? Además de seguir trabajando en los temas que querés seguir sacando y presentar el álbum. 

Quiero ir a tocar este álbum en vivo, ya se están fijando algunas fechas en México y Costa Rica. El plan es sacar mucha música nueva ahora en esta primera mitad del año, y ojalá poder ir a tocar en vivo. La idea es en la segunda mitad del año ir a compartir música en vivo, y de aquí hasta junio estaremos lanzando más sencillos y el álbum. 

¡Genial! Tenés un año de muchos proyectos y mucho entusiasmo. Si ‘Tu Manera de Amar’ es una declaración de amor tanto a una persona como para ti misma, ¿qué te gustaría que le deje al público cuando la escuche por primera vez?

Me encantaría que la reacción sea del cuerpo, que sea visceral, que den ganas de moverse. Yo creo que cuando nos sacudimos y movemos el cuerpo dejamos ir muchas cosas que nos pesan, entonces me encantaría que sin pensarlo mucho les haga empezar a mover el pie, tal vez después los hombros, y después el cuerpo entero.

¿Te gusta que tu música haga bailar?

Sí, a mí me encanta bailar, y hay momentos para todo. Hay momentos para sentarnos a llorar, o para intelectualizar el mundo que nos rodea, pero hay también muchos momentos para bailar.

A la hora de presentarte en vivo ¿sentís que se genera como una comunidad en tu público?

Sí, en estos últimos conciertos que tuve el año pasado sentí algo muy bonito, y es que hubo como un momento muy íntimo en mi show donde yo me senté a tocar el piano y sucedieron cosas increíbles. Durante esos momentos una persona le pidió matrimonio a otra, en uno de mis shows una mamá se puso a llorar y a cantar tan duro que se escuchaba en el público porque hay una canción que se llama ‘Paloma’ que es una canción de maternidad, surgieron cosas muy bonitas en ese momento. 

¿Tenés alguna historia sobre fans que te haya marcado, o alguna anécdota para compartir?

Uy, sí, muchísimas, muchísimas historias. Son las que me mantienen haciendo música. Yo siempre digo que nosotros liberamos las canciones y es como liberar un barco, y no sabes si vas a llegar a otro puerto, pero cuando te cuentan historias así sabes que tu música está llegando, y sabes que han perdido a seres queridos, o que les rompieron el corazón, o historias de amor, bodas, personas que se casan con mi canción, y eso siempre es un honor, de verdad que me honra muchísimo.