La banda originaria de Baltimore, Turnstile, lanza hoy NEVER ENOUGH, su esperado cuarto álbum de estudio. Con una propuesta sonora más matizada pero igual de audaz, el disco consolida a la agrupación como una de las fuerzas creativas más importantes del panorama musical actual, trascendiendo las fronteras del hardcore tradicional.

Tras el éxito rotundo de GLOW ON (2021), que catapultó al grupo desde los márgenes del punk hacia la esfera mainstream —con nominaciones al Grammy incluidas—, NEVER ENOUGH responde a una pregunta inevitable: ¿puede Turnstile seguir evolucionando sin perder su esencia? La respuesta, contundente, es sí.

El corazón del nuevo álbum lo ocupa ‘LOOK OUT FOR ME’, una obra de siete minutos que inicia con el distintivo golpe hardcore del grupo y se transforma gradualmente en un beat minimalista al estilo del Baltimore club. Es un tema ambicioso, no solo por su duración, sino por la confianza con la que transita entre estilos aparentemente inconexos. Esa misma ambición recorre todo NEVER ENOUGH, un álbum que no se conforma con repetir fórmulas, sino que amplía el universo sonoro que Turnstile ha construido con cada entrega.

Producido en parte por el reconocido Will Yip —colaborador habitual de la banda—, el álbum incorpora elementos novedosos como una línea de metales en ‘DREAMING’, un solo de flauta de inspiración espiritual en ‘SUNSHOWER’, sintetizadores brillantes en ‘I CARE’ y collages sonoros glitch en ‘DULL’. Estos recursos, lejos de sentirse forzados, se integran con naturalidad a la propuesta de Turnstile, enriqueciendo su identidad sin diluirla.

Si bien NEVER ENOUGH retoma elementos del celebrado GLOW ON, lo hace con una sensibilidad distinta: más contenida, más enfocada. Canciones como ‘SEEIN’ STARS’, con colaboraciones de Hayley Williams y Dev Hynes, exhiben una sofisticación rítmica y emocional que denota madurez, combinando líneas de bajo funky, solos de guitarra de estadio y una producción pulida que no sacrifica la energía visceral de la banda.

Por supuesto, Turnstile no abandona su raíz hardcore. Temas como ‘BIRDS’ canalizan la potencia directa que los caracteriza, aunque incluso en sus momentos más explosivos, el álbum encuentra espacios para la pausa y la introspección. ‘DULL’ y ‘SUNSHOWER’ son ejemplo de ello: inician con frenesí para luego descomponerse en paisajes sonoros abstractos, demostrando una voluntad de explorar sin perder la brújula.

En suma, NEVER ENOUGH no es una ruptura con el pasado, sino una expansión consciente de su legado. Turnstile no ve el punk como una camisa de fuerza, sino como un punto de partida. Este nuevo trabajo reafirma su capacidad de hablarle tanto a la multitud del mosh pit como a quienes buscan algo más allá de los riffs abrasivos: una experiencia sonora compleja, cambiante y profundamente personal.