Andy Bell: “Se trata de protegernos y celebrarnos, seas quien seas, no importa” [ENTREVISTA]

Fiel a su estilo libre y rebelde, Andy Bell nos abre las puertas de su versión del cielo con su nuevo álbum “Ten Crowns”. Una oda a la celebración del ser uno mismo, a la nostalgia de los 80 y a encontrar espacios donde ser felices.

A sus 61 años y con casi cuatro décadas de carrera, Andy Bell sigue expandiendo su creatividad al máximo. El cantante británico -a quien conocemos como la cara más extrovertida del dúo de synthpop Erasure- lanzó su nuevo trabajo solista Ten Crowns este viernes 2 de mayo.

Producido por Dave Audé, el álbum consta de diez canciones bailables y envolventes, con numerosas referencias a íconos de los 80 más allá del propio Erasure: Queen, David Bowie, Depeche Mode, Cher, e incluso algo del eurodance que llegó después, como Eiffel 65. A la vez, muchas de sus melodías y sonidos pueden encontrarse también en la música actual, haciendo de Ten Crowns una mezcla atemporal y retrofuturista que acompaña su mensaje principal: celebrarse a uno mismo en vida, sin importar las circunstancias.

El disco incluye dos colaboraciones con artistas muy diferentes entre sí: la ecléctica Sarah Potenza acompaña a Bell en Lies So Deep, mientras que en Heart’s a Liar aparece una eminencia del rock de los 70: Debbie Harry, de Blondie.

Para quienes siguen fieles a los formatos físicos, Ten Crowns no se lanzó únicamente en plataformas digitales. Con mucho énfasis en la experiencia material, también fue editado en CD, vinilo e incluso casete. La edición deluxe incluye un mix exclusivo de Dave Audé, ideal para una escucha continua, que no estará disponible en streaming ni descarga digital: solo puede conseguirse en los discos dobles. En cuanto al vinilo, se publicó en distintos colores, incluyendo una edición limitada con ilustración impresa. El casete, por su parte, cuenta con solo 400 copias: una cinta dorada que incluye una fotografía autografiada por Bell para los oyentes más devotos.

Andy Bell nos cuenta sobre el nuevo universo que hoy nos comparte y su visión actual de la industria, en una conversación llena de statements sólidos, como siempre lo caracterizó.

¡Felicitaciones por el álbum nuevo, me encantó! Identifiqué muchas influencias y siento que tiene un sonido atemporal. En particular, noté influencias de la música de los ochenta y también de la música actual. ¿Cómo fue el proceso creativo? ¿Cómo encontraste eso que buscabas?

Bueno, debo decir que hacer este álbum fue muy divertido. Con Dave Audé, el productor y coescritor del álbum, nos conocemos hace ya 12 años. Todo este tiempo estuvimos de a ratos componiendo canciones juntos para el álbum. Entonces, al principio, siempre que teníamos tiempo libre, íbamos a Los Ángeles, donde vivíamos. Después él se mudó con la familia a Nashville, y entonces yo iba allá. 

Siempre amé la música dance. Cuando era adolescente y Michael Jackson lanzó Off the Wall, yo necesitaba salir a bailar. Lo mismo con Dreaming de Blondie. Con todo lo que me gustara y me diera ganas de bailar, yo necesitaba salir y hacerlo. Amo la música, y tener la oportunidad de hacer un álbum específicamente para bailar es genial. David hace remixes de canciones todo el tiempo para muchos artistas: Rihanna, Beyoncé… Entonces se me ocurrió que podía ser una buena oportunidad. Entonces nos pusimos a componer, y salieron muy buenas canciones. Él publicó tres temas con su propio sello hace diez años y dos de ellas fueron números uno en el Billboard Dance Chart, y eso nos generó una buena sensación. También, cuando Erasure se volvió muy popular en Norteamérica y Sudamérica, nuestras canciones en general las promocionaban los clubes, entonces tengo una gran afinidad por esos ambientes. Además, tenés razón, no escucho mucha música de ahora, aunque no suena tan diferente a lo que hacíamos a fines de los ochenta o principios de los noventa, solamente le agregan cosas o hacen los hooks más breves. Tiene menos melodía, y a mí me gusta mantener eso porque justamente soy el cantante. 

Cuestión que hicimos estas canciones, son diez, pero teníamos más. Las letras hablan sobre la necesidad de cuidarnos entre todos, más las minorías sociales, que siempre son olvidadas. Son la carta que los políticos siempre usan, pero nunca juegan. Es el viejo truco, y sigue sucediendo. Se trata de protegernos y celebrarnos, seas quien seas, no importa. También hablamos de nuestra versión del cielo, que es un lugar en nuestra imaginación. Podemos tener un cielo en la tierra si así lo deseamos. Yo no pienso que sea un lugar al que vas después de la muerte, podés crearte un cielo para vos y para otros. Básicamente, el álbum va de eso. Es música dance góspel espiritual.

Increíble. ¿Y cómo se conecta ese concepto hermoso con Ten Crowns, el nombre del álbum?

Literalmente, no se nos ocurría un nombre para álbum. Estábamos en Miami y yo me tenía que poner diez coronas en los dientes, todas al mismo tiempo. Luego nos dimos cuenta de que también se relacionaba a la corona real, o la corona que se pone en la cabeza, y también a la coronación del parto en el nacimiento de un bebé. Es algo nuevo que viene al mundo. También me gusta que, en el tarot, el diez de oros se relaciona con el árbol de la vida. Simbólicamente, es como un mapa de guía espiritual. Si aprendés los pasos que tenés que dar, vas a ir por esos caminos que te van a llevar a la cima, al Kéter, del cual no estoy ni cerca. Todavía estoy bastante lejos.

Vivimos en un mundo dominado por las plataformas de streaming, pero seguís eligiendo publicar en CD, vinilo e incluso casete. Ten Crowns en físico incluye una edición especial y un mix exclusivo de Dave Audé que no va a estar disponible en la versión digital. ¿Por qué quisiste mantener esta costumbre? ¿Los formatos físicos tienen un rol especial para vos?

Erasure se formó en la era predigital, nosotros vendíamos nuestra música en formato físico. A mí me gustan las cosas tangibles, que puedo tocar con las manos. Cuando la música digital llegó para quedarse, el formato MP3, cargué toda mi colección de CD en iTunes y, lentamente, esa música fue arrebatada. Es como si ya no te perteneciera, aunque no tengas los derechos de esas canciones, como si reemplazaran tu colección de música. A nuestro público le gustan los formatos físicos como a nosotros, no usan mucho Spotify. Eso es importante para nosotros. Para mí, hoy los músicos se convirtieron también en artistas, como Andy Warhol o Dalí, o el que sea, la gente quiere tener una copia original en sus manos, no algo inexistente, intangible, porque de alguna manera, eso no es confiable. Me gusta cuando tu vida te pertenece a vos.

Siento como millennial que ya no somos dueños de nada. Compramos cosas que no nos pertenecen, pagamos solamente por suscripciones. Yo tampoco me siento cómoda con eso, todavía me gusta comprar CD y vinilos.

Es hermoso tener algo. A mí me encantan las antigüedades. Me encanta la historia del vinilo, los cilindros de cera que usaban, los gramófonos, cómo surgió la música grabada… Al principio, usaban la espina de los cactus. Ahora en la modernidad, los productos destruyen el planeta, porque no están hechos para que duren, en cinco años más o menos ya caducan, los tenés que reemplazar todo el tiempo, y generan montañas de basura. Algo que tiene su uso, que se raya, como un vinilo, adquiere su carácter, un valor diferente, y por eso le tenés un cariño especial. Esas otras cosas de la tecnología nueva no tienen ese valor. Creo que, si la música es descartable, las personas se vuelven también descartables, que es lo que está sucediendo.

El álbum tiene dos colaboraciones potentes. Está Debbie Harry de Blondie, referente total del punk rock, y también está Sarah Potenza. ¿Cómo fue trabajar con ellas? ¿Cómo sucedieron estas colaboraciones?

Es hermoso porque siento que fue una plegaria, un sueño hecho realidad el de trabajar con Debbie. Con ella solo nos vimos unas cinco veces y, aunque aceptó la propuesta, no estuvimos juntos en el estudio porque ella está muy ocupada. El hecho de que me dijo que sí me hizo recuperar mi fe en la industria musical, en que todavía queda gente a la que realmente le interesa la música. Ella es una gran mentora e ídola para mí desde que era un adolescente. En cuanto a Sarah, es una artista joven, tiene el entusiasmo de alguien que no es cínico ni todavía fue corrompido por la industria, y es hermoso conocer y ver a alguien así. Mi amor por la música es verdadero y, si soy fan de alguien, seguro lo seré siempre. No podés ser famoso de un minuto a otro y al otro día ya no ser nadie. Para mí, se trata de crecer y tener una apreciación por cosas con más valor.

Absolutamente. Por último, ¿cuáles son los planes para la gira de Ten Crowns? ¿Hay algo planificado para este año?

En mayo vamos a tocar en el Reino Unido y después nos vamos a Norteamérica en octubre o noviembre, creo, y luego ojalá podamos ir a Sudamérica cerca de año nuevo.

¡Buenísimo! ¿Estás emocionado?

Sí, muy emocionado, ahora estamos ensayando y la semana próxima la banda viaja a Londres. Tenemos tres días para ensayar, y salimos a tocar, tenemos unos diez shows. Luego de eso tenemos un descanso y después vamos a Europa. Otro descanso y vamos a Norteamérica. Y un último descanso y ojalá vayamos a Sudamérica. Va a estar bueno.

Traducción al español: Lucero Otero

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